En muchos de los procesos de producción de la actualidad, se hace una tarea esencial el medir con precisión la cantidad de flujo dentro de un sistema que, de no funcionar de una manera adecuada, generaría fallos y una marcha inestable, así como un gasto innecesario como el explicado en el coste de las pérdidas de vapor en plantas industriales.
Desde luego que existen procedimientos o métodos para medir el vapor industrial, que permiten comprobar la cantidad de vapor generado, lo que ayuda a que el proceso esté bajo control y, de esa manera evitar, por ejemplo, que las materias primas no se procesen de la manera idónea, lo que acarraría daños en la maquinaria de producción.
De los métodos para medir el vapor industrial conocidos, en primer lugar, se encuentra la medición tradicional con placa de orificios, herramienta que permite medir con rigor el flujo del fluido, vapor o gas de un sistema, para poder controlarlo y asegurar que llegue en una cantidad apropiada donde sea necesario.
Entre los beneficios que ofrece este medidor, ampliamente utilizado en la industria por más de 50 años, destaca la mejoría en el proceso de control, la identificación de dónde se utiliza mayor energía, el monitoreo de los cambios en los procesos y el suministro de información importante para los operarios.
Sin embargo, el diseño del instrumento lo hace susceptible al desgaste y está optimizado para una sola condición. La placa de orificios, además, por sí sola no puede convertir el flujo en una medición de velocidad fija, mientras que la caída de presión tiene que convertirse en flujo por medio de un dispositivo de medición de presión diferencial para verificar que está ocurriendo una fuga.
La otra opción, entre los métodos para medir el vapor industrial, es la medición con el medidor de vórtices, que brilla entre los contadores más recientes y que funciona con menos de un psi de caída de presión, un beneficio sustancial al calcular el coste de producir vapor.
Este medidor opera con el principio de que cuando un fluido contornea un obstáculo, efectos relacionados con la viscosidad producen secuencialmente torbellinos después del mismo. Entre las ventajas de este comprobador se encuentran que no tiene partes móviles y que tiene poca resistencia al flujo, mientras que entre las desventajas destaca que con caudales bajos, no se generan impulsos y el medidor puede dar lecturas bajas e incluso cero.
Los medidores de vapor modernos también brindan beneficios adicionales, como convertir la velocidad en flujo másico, como kilogramos o libras por unidad de tiempo. Al convertir automáticamente la medición de flujo en flujo másico, un fabricante puede colocar más metros aguas abajo de manera más fácil para monitorear si hay fugas.
Por ejemplo, si el vapor pierde calor a medida que viaja a través de la línea de proceso, la monitorización del caudal volumétrico será ineficaz. Los cambios en la temperatura y la presión afectan la tasa de flujo volumétrico. Esto significa que, por ejemplo, 1,000 pies cúbicos medidos desde la caldera a 25 psi no son equivalentes a la misma lectura medida aguas abajo, donde la presión ahora es de solo 20 psi.
La capacidad de compensar la temperatura y la presión y convertir la salida en flujo másico proporciona una medición que se puede comparar de manera efectiva, independientemente de los cambios, en las condiciones de funcionamiento en los puntos de medición. Además, las nuevas tecnologías en los métodos para medir el vapor industrial son más resistentes al desgaste y son capaces de medir un rango más amplio de caudales.
Para administrar los crecientes costes de la energía, los fabricantes deberán asegurarse de que los procesos de producción sean moderados y monitoreados afectivamente. La mejor técnica para mejorar la eficiencia de la producción y entrega de vapor es tener un mínimo de dos puntos de monitoreo (salida y llegada) en la línea de distribución. Otro método utilizado que quizá es poco conocido para lograr el ahorro de energía en sistemas de vapor con el uso de ultrasonido.
Si es posible una fuga en uniones a lo largo de la línea de distribución, se debe considerar instalar sensores adicionales. La capacidad de medir la calidad del vapor de manera efectiva a través del sistema de proceso es crucial para controlar el coste de producir vapor y cumplir con los requisitos de informes reglamentarios.
Para más de los métodos para medir el vapor industrial y reducir el coste de las pérdidas de vapor en plantas industriales, está disponible el Newsletter de Vapor para la Industria, sitio donde se podrá actualizar en las nuevas tendencias del sector industrial.